miércoles, 24 de octubre de 2007

¿Necesitamos juicios orales en México?

Los juicios están regulados por normas según su materia: hay juicios civiles, penales y administrativos (o fiscales) principalmente y de competencia estatal y federal. Si multiplicamos el número de estados (32 incluyendo al D.F.), más la Federación, por las tres grandes materias, el resultado es 99 normas procesales diferentes, sin contar con los muchos procedimientos llevados “en forma de juicio” por autoridades no judiciales como las contralorías.

Nos perdemos en el procedimiento. Casi cualquier paso adelante en un juicio necesita 1) Que una de las partes pida algo por escrito 2) Que el tribunal lo autorice o niegue 3) Que se ejecute. Para que una persona pueda simplemente consultar un expediente, el trámite puede durar hasta una semana.

Es frecuente que, después de un largo papeleo, el Ministerio Público decida no enviar un expediente al Juzgado por algún motivo que estaba presente desde el inicio de su averiguación. Muchos papeles, pocos resultados.

Entre los abogados de México y de casi todo el mundo, predomina la idea de que abundar siempre es preferible. Hay demandas, citatorios y sentencias que rebasan las mil páginas. ¡Un solo documento de más de mil páginas! (¿copiar-pegar?)

Si aleatoriamente tomamos diez expedientes de diferentes juzgados mexicanos, el común denominador será la reiteración: el mismo dato, el mismo documento y la misma idea aparecen una y otra vez.

Si el objetivo de un juicio es la decisión (sentencia) del juez sobre una controversia, después de analizar lo propuesto por las partes, ¿cuál es el sentido de oscurecer y retardar ese análisis con papeleo innecesario?

Los documentos que son pruebas, como los contratos, además de los que registran lo que sucede en un juicio (actas), entre otros, son imprescindibles. Hay muchas razones para que aún los juicios orales tengan un expediente, lo que no es razonable es contaminar el análisis con procedimientos y papeles excesivos.

Necesitamos juicios orales, no hay duda. También necesitamos evolucionar en nuestra visión como abogados, dejar de trabajar para el procedimiento. Al simplificar el procedimiento, veremos más claro que el objetivo no es ese gran expediente que llegaremos a formar después de mucho tiempo, el objetivo es la justicia.

En Nuevo León un divorcio tardaba en resolverse de 6 a 8 meses y ahora se resuelve en 12 días gracias a los juicios orales. Hay datos alentadores en los aún pocos estados que ya empezaron.

El enorme cambio cultural que viene, idealmente debe incluir otras ideas para que realmente nos lleven a una mucho mejor impartición de justicia:

Simplificar y en lo posible homologar los procedimientos.

Que los procedimientos siempre incluyan filtros que permitan soluciones alternativas como la conciliación.

Que los abogados escribamos y hablemos menos, que nos enfoquemos en los resultados.

Procedimientos claros para los ciudadanos. Que puedan conocer la estructura básica del juicio y tener una expectativa real sobre el tiempo que tomará.


¡Apoya los juicios orales!

martes, 25 de septiembre de 2007

¿Qué es el cambio climático? ¿Qué puedo hacer?

www.climatecrisis.net



El bióxido de carbono y otros gases calientan la superficie del planeta al atrapar calor solar en la atmósfera. Esto es positivo porque hace que nuestro planeta sea habitable. Sin embargo, el uso de carbón, gas y petróleo y la deforestación los bosques, han aumentado dramáticamente la cantidad de bióxido de carbono en la atmósfera y la temperatura está aumentando.

Si el calentamiento continúa, podemos esperar consecuencias graves:

El nivel del mar podrá aumentar alrededor de 7 metros y muchas costas desaparecerían.

Las ondas cálidas serán más intensas y frecuentes.

Más de un millón de especies se extinguirían hacia el 2050.

En 1997 los países industrializados firmaron el Protocolo de Kyoto para reducir los gases de efecto invernadero. A la fecha, Estado Unidos, China e India no están dentro del Protocolo.


Todos podemos combatir el cambio climático en nuestra vida diaria. Algunas ideas:

-Usa focos ahorradores de energía.

-Apaga las luces que no uses.
-Descongela el refrigerador periódicamente.
-Usa el coche lo menos posible.
-Usa la lavadora llena (ahorra agua y electricidad)
-Tapa las ollas en la cocina. El agua se calentará más rápido y ahorrarás gas.
-Cierra la llave mientras tallas los trastes.
-No laves tu coche con manguera.
-Produce menos basura. Recicla y repara en lo posible.
-No uses el inodoro como basurero, gasta mucha agua. Si puedes, instala un aparato ahorrador.
-Báñate rápido, cierra la llave al enjabonarte.
-Apaga el bóiler durante el día.
-Desconecta los cargadores de celulares cuando no los uses.
-Apaga los aparatos que no estés usando.

¿Alguna otra?

Fuentes:

www.climatecrisis.net

www.news.bbc.co.uk

domingo, 9 de septiembre de 2007

¿Cómo hacer una solicitud de acceso a la información?

Toda la información en poder de la Administración Pública Federal es pública, salvo la que esté clasificada como confidencial (datos personales, principalmente) o reservada (relacionada con temas como seguridad nacional o negociaciones comerciales internacionales)

Cualquier persona, sin necesidad de dar ninguna explicación, puede pedir información al gobierno. Esto puedes hacerlo de las siguientes formas:

Por Internet, a través del Sistema de Solicitudes de Información (SISI) del Instituto Federal de Acceso a la Información (IFAI). La página es
www.sisi.org.mx

Por correo certificado o mensajería, dirigido a la unidad de enlace de la oficina gubernamental que tiene la información que necesitas. En la página de Internet de cada una puedes encontrar la dirección, también en la página del IFAI (
www.ifai.org.mx) o puedes preguntarnos en info@derechoaentender.org

Personalmente en las unidades de enlace.

No hay algún formato obligatorio para presentar la solicitud cuando se hace por escrito, pero existe un formato disponible en la página del IFAI.

La respuesta debe llegar en menos de 20 días hábiles.


Fuentes:
Ley Federal de Acceso a la Información Pública Gubernamental
www.ifai.org.mx


El propósito de este artículo es meramente informativo. No pretende suplir sino únicamente difundir información sobre el trámite.

martes, 21 de agosto de 2007

¿Cómo tramitar el R.F.C.?

Comerciantes y recaudadores de impuestos, Ruysdael, 1542


Estos son los pasos y requisitos para personas físicas según el Servicio de Administración Tributaria (SAT):

Programa una cita en
www.sat.gob.mx o llama desde el D.F. al 5227 0297 y del interior de la República al 01 800 904 5000.

Llega a la cita con los requisitos completos:

a) Original y copia de comprobante del que será tu domicilio fiscal (recibo de predial, recibo o contrato de luz, teléfono o agua, contrato de arrendamiento, etc.)

b) Identificación oficial (Credencial del IFE, Pasaporte vigente, Cédula Profesional, Cartilla Militar o credencial con fotografía y firma expedida por el gobierno federal, estatal o municipales)

c) Cuenta de correo electrónico.

d) Copia de la CURP o de una identificación oficial que la contenga (Cédula Profesional, por ejemplo)

Si no tienes Clave Única de Registro de Población (CURP):

Acta de Nacimiento (Copia certificada y copia)

Si eres mexicano por naturalización, original o copia certificada y copia de tu carta de naturalización.

Si eres extranjero, original y copia del documento migratorio que te autoriza las actividades por las que te vas a registrar.

Más información en
www.sat.gob.mx

martes, 31 de julio de 2007

Comprensión, salud y vida

Artículo publicado en El Universal del 30 de julio de 2007


Leer puede alargar su vida

Los bajos niveles de lectura de las personas en el mundo hacen que se priven de obtener información crítica acerca de su salud, lo cual podría acortar significativamente sus vidas.

Estudios efectuados por David Baker en la Universidad de Northwestern, en Chicago, indican que, más allá de todas las implicaciones educativas, culturales y sociales que conlleva el hecho de carecer del hábito de la lectura, en ciertos rubros cobra una importancia nunca antes evaluada, al grado de que puede acortar o prolongar la vida.

La investigación señala que las personas mayores con niveles inadecuados de lectura en materia de salud, es decir con capacidad limitada o nula para comprender a cabalidad los términos médicos y farmacológicos, podrían ver reducidas sus expectativas de vida en relación con quienes poseen una “cultura literaria” más amplia en el rubro.

Los resultados sugieren que, por ejemplo, los individuos incapaces de comprender las indicaciones y contraindicaciones impresas en medicamentos de uso delicado, presentan tasas de mortandad hasta 50% más elevadas, comparadas con las personas que efectúan lecturas adecuadas.

En este punto, conviene destacar que los niveles de “cultura de la salud” toman como parámetro un índice que evalúa la capacidad para comprender materiales básicos asociados con la salud, como los impresos en las etiquetas de los medicamentos, las formas hospitalarias y las recetas médicas.

“Es cuestión de vida o muerte. El número de decesos entre las personas con bajo índice de lectura o comprensión de la misma en materia de medicina y salud es enorme”, comentó Baker.
El experto señaló que “cuando los pacientes son incapaces de leer, no están en posición de hacer las cosas que se requieren para mantenerse saludables. No saben cómo tomar sus medicamentos correctamente ni entienden cuándo deben buscar ayuda médica, ni como cuidar sus enfermedades”, y agregó que esas son las razones por las cuales las personas son más susceptibles de acortar su existencia.

Millones de personas en el mundo tienen apenas los conocimientos mínimos, o incluso por debajo de lo básico, en torno de la literatura asociada con cuestiones de salud. “Hay un mínimo de habilidades de lectura que se requieren para que un paciente haga las cosas que un médico espera de él. Pero si alguien está por debajo del nivel de comprensión requerido, entonces pasarán cosas malas”, puntualizó el especialista.

El estudio comenzó en 1997, cuando se entrevistó a 3 mil 260 pacientes de edades de 65 años o mayores, sometidos a cuidados médicos, en distintas ciudades estadounidenses. Los investigadores preguntaron a los participantes acerca de raza, nivel educativo, ingresos, hábitos de salud (si fumaban, bebían o realizaban ejercicio), así como sobre condiciones médicas crónicas como diabetes, asma, artritis, hipertensión, enfermedades del corazón y cáncer.

Los sujetos del estudio completaron un test de “cultura de la salud” que incluía la lectura de pasajes y la comprensión de cifras y conceptos impresos en envases de medicamentos. Posteriormente, en 2003, los investigadores determinaron qué pacientes habían muerto en el transcurso de esos seis años tras haber sido entrevistados.

Los resultados mostraron una urgente necesidad de encontrar alternativas para “educar” a los pacientes acerca de sus estados de salud y los cuidados que requieren.

Baker hizo hincapié en la necesidad de “usar un lenguaje llano. No estamos hablando de materiales ‘a prueba de tontos’. Hablamos de emplear un lenguaje simple que el promedio de las personas pueda entender fácilmente”, enfatizó.

La idea es eliminar la jerga especializada del lenguaje de los médicos, así como de los materiales impresos asociados con cuestiones de salud. Un ejemplo de ello sería decir “azúcar” en lugar de “glucosa” cuando se trata de diabetes.

Muchos conceptos son más fáciles de comprender a través de elementos multimedia que con simples palabras. Baker explicó que “si una imagen dice más que mil palabras, tal vez un video valdría igual que 10 imágenes. De ahí que si se le va a explicar a un paciente acerca de una condición llamada falla cardiaca, en la cual el corazón no bombea suficiente sangre, una imagen en movimiento será más ilustrativa y clara que la explicación con palabras o una foto fija”.

Con frecuencia los pacientes requieren de varias explicaciones para comprender por completo sus problemas de salud, las instrucciones para el cuidado de la misma o para la toma de medicamentos. En ese sentido, el investigador insistió en que es necesario aprender a repetir estas cosas a los pacientes “hasta que sean capaces de explicarlas ellos mismos con sus propias palabras”.

Baker y sus colegas trabajan en la actualidad en la elaboración de materiales educativos especialmente diseñados para explicar a sus pacientes problemas de salud y sus cuidados como asma, diabetes y cáncer colorrectal. De hecho trabajan conjuntamente con ellos para asegurarse de la efectividad del lenguaje que emplean.

Esperan que estos materiales y el cambio de hábitos de lenguaje de los médicos puedan beneficiar a los pacientes, en particular a aquellos de mediana edad y avanzada, pues las funciones mentales declinan a partir de los 30 años y las capacidades de lectura y comprensión se reducen entre los adultos mayores. (Universidad Northwestern)

lunes, 30 de julio de 2007

Los fantasmas sí existen... ¡¡¡y cometen fraude!!!

Me gustaría contar lo que recientemente nos pasó a mi esposa y a mi.

Bueno pues resulta que mi esposa recibe una llamada telefónica, la persona al otro lado de la línea le dice muy efusívamente “Felicidades ha resultado ganador en la promoción firme y gane con tarjetas master card y visa”, puede pasar por su cámara digital a tal dirección. ¡¡¡Viva!!! Mi mujer nunca se había ganado nada en su vida, estaba muy emocionada y me lo dice con gran alegría. Primer pregunta:
- ¿De qué banco te hablaron?
- No pues es de master card y visa, osea que no me dijeron que tarjeta
- ¿y qué hay que llevar?
- Una identificación oficial y un testigo ocular
- ok, vamos al rato

Llegamos al lugar citado y es un edificio que por ningún lado le ves cara de oficinas serias, llegamos a recepción y no nos piden registrarnos, suena raro ¿no? En fin llegamos al despacho marcado y es una recepción en la que a duras penas existe una salita, un mueble para recepción y una TV enorme pero apagada. Al presentarnos en la recepción nos piden la clave que le proporcionaron por teléfono a mi esposa, la facilitamos y en seguida nos pide una identificación oficial, en ese momento me doy cuenta que la dejé en el auto y le digo a mi mujer, espérame, voy por ella; al ver esto la recepcionista nos aclara que no es necesario, que si coincide la clave con los nombres proporcionados no hay problema (¡¡zas!! Otra cosa rara, están entregando regalos y ¿no hay bronca con la identificación?) y en seguida nos dice que le mostremos una tarjeta de crédito o débito para corroborar que trae el logo de master card o visa.

Después de aproximadamente 5 mins. llega un tipo diciendo que nos va a atender y se presenta como licenciado en mercadotecnia, cuando entramos vemos como 10 mesitas llenas de parejas y un “licenciado en mercadotecnia” frente a ellos, todos con hojas de block amarillas y escribe y escribe explicándoles algo.

Cuando llegamos a una de esas mesas veo guías de hoteles y playas. El “licenciado en mercadotecnia” lo primero que nos dice es: -Antes que nada, felicidades, ya han ganado, yo al final de la plática les voy a entregar un certificado de regalo que los hace acreedores a una cámara digital o un teléfono celular, si escogen la cámara es totalmente gratis, pero si quieren el celular me tienen que pagar el tiempo aire y la activación…

Enseguida le llama a su asistente y le pide que verifique nuestra clave, cuando regresa nos vuelve a felicitar, nuestra clave es una de las 20 ganadoras de ese día, por lo tanto nos va a dar un beneficio extra… Somos acreedores a descuentos especiales para viajar en las mejores aerolíneas y hoteles a nivel nacional e internacional, nos da una forma en la que nos preguntan datos como ingresos, lugar de las últimas vacaciones, etc. Yo le dije que no le iba a contestar por ningún motivo algo que tuviera que ver con mis ingresos, a lo que él me contesta, “no hay problema, esto es solo para estadística”.

Después de un rato nos estuvo tratando de “vender” un plan de viajes, donde obteníamos descuentos hasta por 10 años, por solo $16,000.00 de inscripción y $300.00 mensuales de mantenimiento. No me reí porque la verdad ya tenía tan mala espina que pensé si lo hago me la parten. Cuando le dije que no muchas gracias, me dijo ¿cuál es el problema? ¿cuál? Pues simple no traigo tanto cambio en la bolsa. Entonces llega su “gerente” y me dice, ¿cómo vió el plan? Pues bien, pero pues no se puede, es mucho, le dice al licenciado en merca que se retire y entonces me aborda
- ¿Qué le parece si le ofrezco el mismo plan pero por 3 años con los mismos beneficios? Ese le cuesta $3,300.00 y los $300.00 de mantenimiento.
- No pues tampoco
- Pero ¿por qué?
- Pues porque no estoy interesado, tengo otras prioridades

Así estuvimos un rato hasta que entendió que no. Entonces me extienden mi certificado para recoger mi premio y me dan otra dirección bastante alejada de ese lugar y nos acompañan a la salida. En ese momento mi mujer me preguntó si íbamos por el regalo, entices rompí el “certificado” y le dije, no, ya vámonos a la casa. ¿Por qué lo hice? Sencillo, se trataba de un vil fraude.

Aquí lo importante no es que no me hallan estafado, sino explicarles como me dí cuenta de que era un fraude:

1. No había ningún logo, ni pancarta, ni publicidad por parte de master card o visa (Si hay algo que quieren las marcas es que recuerdes siempre con quien ganaste)
2. Cuando nos pidieron identificación y no la traíamos (nadie te regala nada sin pedirte eso, se los puedes volver a reclamar)
3. Su papelería eran vil hojas impresas en word, nuevamente sin logos de ningún tipo (insisto, un banco por fuerza cuida su imagen)
4. El famoso licenciado no traía reloj, cadenas ni nada, osea nada que distrajera mi atención cuando explicaba y escribía.
5. Todo el plan te lo explican en hojas de block (que raro que en una promoción tan grande no gasten en hacer tripticos o folletos)
6. Siempre que escribían se esmeraban por escribir enorme el famoso descuento del 50% o las palabras “SOLO HOY”
7. Rayoneaban por todos lados su forma para datos estadísticos, ¿quién los iba a entender cuando fueran transcritos?
8. ¿Por qué tienes que pagar por algo tan tonto como tiempo aire?
9. Y casualmente todos los que ahí estaban habían sido de los 20 ganadores

Lo que les puedo decir es que tengan cuidado, no den datos y fíjense bien en estos puntos, una empresa o banco cuida mucho su imagen. Y si no es a través de su estado de cuenta, no crean nada de haber ganado un premio, verifíquenlo vía telefónica, siempre hay una línea de atención y si quieren irse de viaje, pues mejor vayan a una agencia de viajes o directamente a las aerolíneas o páginas de los hoteles.

El derecho a entender también tendría que explicar un poco los documentos oficiales y como detectar un fraude, recuerden que no solo las grandes empresas nos llevan al baile, las fantasmas también.

viernes, 20 de julio de 2007

ALERTA SOBRE EL REGLAMENTO DE TRÁNSITO

Hay que celebrar el entusiasmo de las autoridades por aplicar el Reglamento de tránsito metropolitano que hoy entró en vigor, pero también hay que tener muy presente que los agentes no pueden pedirnos detener el coche o que les mostremos documentos salvo que hayamos cometido una infracción (para saber qué es infracción y qué no, sugiero leer el reglamento.)

No se dejen sorprender y tengan presente el artículo 39 del reglamento:


Artículo 39.- Cuando los conductores de vehículos cometan una infracción a lo dispuesto por este Reglamento y demás disposiciones aplicables, los agentes procederán de la manera siguiente:

I. Indicarán al conductor que detenga la marcha de su vehículo;

II. Se identificarán con su nombre y número de placa;

III. Señalarán al conductor la infracción que cometió y le mostrarán el artículo del Reglamento que lo fundamenta, así como la sanción que proceda por la infracción; y

IV. Solicitarán al conductor la licencia de conducir y la tarjeta de circulación, documentos que serán entregados para su revisión y devueltos en el mismo sitio inmediatamente después de que los hubiese revisado.


Una vez efectuada la revisión de los documentos y de la situación en la que se encuentra el vehículo, si éstos están en orden, el agente procederá a llenar la boleta de sanción, de la que extenderá una copia al interesado.

En caso de que el conductor no presente para su revisión la tarjeta de circulación, el agente procederá a remitir el vehículo al depósito vehicular.


jueves, 12 de julio de 2007


El presente correo electrónico (mail) y archivos adjuntos son propiedad de La Empresa Precavida S.A. de C.V., y este puede contener información confidencial y/o privilegiada. En caso de que usted no sea el receptor y/o persona a quien iba dirigido este correo electrónico (mail), en sus datos, cotizaciones u otra información, tenga a bien informarnos que recibió este correo por equivocación, ya que la retransmisión, difusión o reproducción de esta información está estrictamente prohibida. Si usted ha recibido este correo electrónico por error, borre el material de su computadora y notifique a la persona que se lo haya enviado. La Empresa Precavida S.A. de C.V. no se hace responsable por actos no autorizados por el remitente contenido en el correo electrónico y por ningún archivo adjunto. Favor de tomar en cuenta que La Empresa Precavida S.A. de C.V. ni el remitente aceptan ninguna responsabilidad por ningún virus contenido en los archivos adjuntos, por lo tanto es su responsabilidad verificar el contenido de los correos electrónicos y datos archivos adjuntos antes de abrirlos...
¿¿¿Qué???
Con frecuencia encontramos un texto parecido al final de los correos electrónicos. Varias ideas al respecto:
1. No tiene ninguna validez legal en México.
2. Aún si la tuviera, nadie la lee.
3. La información realmente confidencial no está segura en el correo electrónico (bancos, por ejemplo)
4. Sería bueno dejar de llenar los textos de paja, incluyendo los correos electrónicos.

miércoles, 11 de julio de 2007

Aqui mirando

Interesante esfuerzo por sondear en la honestidad humana

lunes, 2 de julio de 2007

La reforma fiscal en claro

¿Qué propone la reforma fiscal?

La reforma fiscal que propuso el Presidente al Congreso el 20 de junio pasado es un conjunto de reformas que podemos resumir así:

Un portal tributario personalizado para los contribuyentes con ingresos menores a 4 millones anuales y de los que reciban más del 80% de sus ingresos por conceptos que no sean salarios, para facilitar el cálculo y pago de sus impuestos.

Simplificar el Impuesto Sobre la Renta para personas físicas.

Exigir la Firma Electrónica para emitir comprobantes y para pedir devoluciones.

Estímulo fiscal al que use comprobantes fiscales digitales.

Impuesto complementario al Impuesto Sobre la Renta para los depósitos bancarios en efectivo que no estén relacionados con alguna actividad que pague impuestos, cuando sean mayores a $20,000.00 durante un mes.

Fiscalizar a personas que no están inscritas en el Registro Federal de Contribuyentes.

Presupuesto ligado a resultados, eficiente y transparente.

Autorizar que estados y municipios puedan cobrar más impuestos.

Transferir la tenencia y su cobro a los estados.

Contribución empresarial a tasa única (CETU): Sustituye al impuesto al activo y se calcula así:
19% sobre la diferencia entre los ingresos y lo gastado en su generación. Sólo se pagaría cuando resulte mayor al ISR a pagar.

Impuesto especial de 20% a apuestas y sorteos.

Impuesto especial de 50% a las pinturas en aerosol.

jueves, 14 de junio de 2007

No a las palabras domingueras


Hay una larga lista de palabras y frases que deberíamos olvidar y no volver a usar.

Unas porque no existen, otras porque no dicen nada, otras por complejas e innecesarias

Para empezar una pequeña lista:

Coadyuvar. Es mejor decir ayudar o apoyar.
Aperturar. No existe, se hace pasar por sinónimo de abrir.
Recepcionar. No existe, se hace pasar por sinónimo de recibir.
Inicializar. Es mejor decir iniciar.
Remitir. Es mejor decir enviar o mandar.
Requisitar. Es mejor decir llenar.
Suscribir. Es mejor decir firmar.
He tenido a bien... ¿Qué? es mejor decir he decidido.
Por medio de la presente... No hace falta, es obvio.
El suscrito. Es mejor decir yo.
El día de hoy / el día de ayer. Es redundante, mejor decir hoy o ayer.

Por un gobierno claro

Buscar el mejor entendimiento posible entre autoridades y ciudadanos es una cualidad común de las sociedades más desarrolladas; quien tiene derechos y obligaciones debe comprenderlos para poder cumplirlos y hacerlos valer.

Los ciudadanos, generalmente, tenemos un muy bajo conocimiento de las garantías individuales, las leyes, la organización de los poderes de la Unión, la forma en la que operan los trámites y servicios y el quehacer del gobierno en general. Esto es mucho más que un asunto de comunicación social, las causas van desde la redacción de las disposiciones y documentos hasta sus más remotas consecuencias, pasando por la operación interna de las propias instituciones. La inseguridad de las personas sobre el contenido de las disposiciones hace a éstas más débiles.

Históricamente, la redacción de las leyes la han hecho abogados pensando en abogados. Para el ciudadano común son textos incomprensibles. Exigirle el cumplimiento de un ordenamiento que no puede comprender y por lo tanto desconoce, genera además de consecuencias jurídicas, frustración e impotencia al no poder cumplir. Lo mismo sucede con el ejercicio de los derechos: la mayoría de los delitos no son denunciados, los derechos laborales a menudo son vulnerados sin que esto llegue a conocimiento de las autoridades, los usuarios de servicios financieros desconocen los términos de sus contratos, los consumidores a menudo no hacen valer sus derechos y así una larga lista de situaciones propiciadas por el desconocimiento, incomprensión y desconfianza de la sociedad.

También entre los servidores públicos, el desconocimiento e incomprensión de las disposiciones jurídicas ha sido históricamente un gran obstáculo. La causa mayoritaria de las irregularidades en el servicio público es la negligencia, ocasionada a menudo por desconocimiento o incomprensión. De esto podemos concluir que también los servidores públicos necesitan más herramientas para conocer y aplicar la ley.

Los portales de transparencia, si bien es cierto que hacen disponibles los datos para los interesados, también es cierto que actualmente el porcentaje de usuarios de Internet en México es bajo (sólo 9% de los hogares mexicanos tienen acceso a Internet según la OCDE), por lo que prácticamente la información es inaccesible para la mayoría, sin contar con que a menudo no es del todo comprensible. No basta con la mera posibilidad de que la información sea accesible, es necesario ponerla realmente a la mano de la mayoría de los ciudadanos.

La seguridad que da al individuo el conocimiento, es un elemento invaluable cuando se trata de sus derechos y obligaciones y del quehacer de su gobierno. La seguridad es el principal valor del Estado de Derecho y la principal obligación de un gobierno. El orden implica que cada una de las partes juegue el papel que le corresponde; en otras palabras, sólo una ciudadanía madura y consciente puede aspirar a vivir bajo el Imperio de la Ley.

Los gobiernos que han trabajado de manera constante en mejorar en estos aspectos, han incrementado la confianza de los ciudadanos, así como el respeto a las disposiciones y el ejercicio de los derechos.

Si observamos el trabajo de países como Australia, Canadá, Estados Unidos, Reino Unido y Suecia, encontraremos como comunes denominadores los siguientes:

Investigan y consideran el nivel de comprensión de los ciudadanos a quienes se dirige determinada información, lo que les permite difundirla en los términos correctos y genera confianza y mayor cumplimiento por parte de la gente.

Cuentan con expertos (internos o externos) en Lingüística, Redacción y materias afines, además de las tradicionales como Derecho, para lograr documentos de calidad, especialmente cuando se trata de leyes.

Desarrollan herramientas para apoyar a los servidores públicos en la realización de documentos claros y simples.

Reconocen el esfuerzo de las instituciones públicas por darse a entender a sus usuarios.

Los mensajes que en lo posible sean más simples y accesibles para la población, no implican falta de respeto, profesionalismo o falta de formalidad de las autoridades. Por el contrario, hacen sentir al ciudadano tomado en cuenta, lo involucran y comprometen pues queda a un lado la barrera de la incomprensión, que a menudo puede ser también una justificación para incumplir disposiciones u órdenes de las autoridades.

martes, 12 de junio de 2007

Tenemos derecho a entender

Quino


Cuando tratamos con un médico, abogado, banquero o contador, lo más probable es que no entendamos buena parte de lo que nos quiere decir. Cada profesión tiene su propio lenguaje técnico y sus costumbres, inclusos sus palabras inventadas.
Sin embargo, tenemos derecho a entender lo que nos quieren decir. El banquero no cumple con decirnos que pagaremos la tasa líder más 8 puntos cuando lo que queremos saber es cuánto nos va a costar el crédito, y el abogado no nos puede salir con que se promovió un exhorto cuando lo que nos preocupa es saber cuándo se resolverá nuestro asunto.
Tal vez es en el gobierno donde encontramos más dificultad para entender: desde el discurso político hasta los requisitos para un trámite, la información del gobierno a menudo no es clara.
En los países más desarrollados este tema es cada vez más relevante y en México empieza a sonar. Tenemos derecho a entender nuestros derechos y obligaciones así como todo lo que tenga que ver con ellos, pero para esto debemos exigir comunicación clara.
No podemos seguir firmando contratos a ciegas o votando por el candidato más simpático. Necesitamos información clara y suficiente para decidir con madurez.